Suerte.

Como que todo se había juntado. Se acuerdan de la gente que se había caído?, ahora está más alto.
Entre peleas, y cosas que ni siquiera me había dado cuenta... se me pasó el tiempo.
Y! aunque suene fácil, no es tan así.
En ciertas cosas hay que seguir con la consecuencia.. esa en donde todo se clarifica y siguen con ese ideal.
Pero cuando dejo de pensar tanto y quiero que simplemente las cosas pasen, mi consecuencia se fue a la chucha.
Una, dos, tres y hasta mil oportunidades daría si fuera necesario para que las cosas fueran como a mi me gustaban.
Y no es que sea INconsecuencia, es perdón, es sentir y dejar equivocarse de nuevo.
Y así se pasó el tiempo te decía... y quizás si me hubiese puesto a pensar en todas las cosas que pasaban en esos días me habría dado cuenta que eran días más que malos, pero un poco de suerte -y algo previamente planificado- hizo que las cosas casi por "arte de magia" cambiaran.
Al final, me di cuenta que para lo único que soy consecuente, es para ser inconsecuente... Y no tanto en lo que hablo y digo, sino en lo que me prometo a mi misma que no volveré a hacer y no lo hago 800 veces más .
Supongo que en parte se aprende más
o sino, por último, esperemos que mi suerte siga ahí todavía.